Otras veces no se deja en manos de profesionales.
Estos casos conllevan una serie de inconvenientes:
- No responde a nuestras necesidades ni funcionales ni estéticas.
- A veces hay que hacer drásticas rectificaciones. Algunos ejemplos de falta de profesionalidad en la previsión y diseño pueden ser:
- El tamaño adulto de una planta es mucho mayor de lo que se pensaba y ocupa todo el jardín.
- Las raíces rompen y obturan la tubería de aguas residuales.
- El árbol va a entrar en contacto con la línea eléctrica que se encuentra arriba de él.
- El sitio donde se deja el coche resulta peligroso para el desembarque del acompañante por falta de espacio y orientación.
- Etc.
Puede incluso pensar que le están regalando el diseño. No le están regalando nada. Le están vendiendo los saldos de plantas y materiales a precio de oro.
Lo habitual es no ver el jardín bajo su aspecto funcional.
Hay que pensar en el jardín igual que uno piensa en una casa. Una casa está formada por espacios: dormitorio, cocina, aseo, comedor, pasillo, cada uno con una función claramente determinada.
Un jardín igual, está formado por espacios: una zona para aparcar, otra para el desembarco de personas, otra para comer al aire libre, otra para el trabajo en el jardín y guarda de herramientas, otra para juego de niños, etc.; todas ellas adecuadamente comunicadas y posicionadas.
En cuanto a las condiciones estéticas, un jardín ha de seguir un tipo de diseño utilizando determinados tipos de formas: rectangular, circular línea suelta, etc. La forma en que estas se combinan responden a criterios pre establecidos que hacen que el diseño final sea aparente o por el contrario no sea percibido o resulte flojo y sin sentido.
Hacer un jardín es caro. Una estimación puede ser aproximadamente el 20 % del valor de la casa.
Puede hacérselo incluso uno mismo y tardar uno, dos, cinco años o incluso toda una vida.
¿No merecerá la pena un pequeño gasto adicional en la elaboración de un estudio serio. De un proyecto que indique en todo momento la orientación y las pautas a seguir para evitar errores y rectificaciones y obtener un jardín que satisfaga nuestras necesidades tanto estéticas como funcionales?. Yo le diría que sí.